Sin duda alguna, el coronavirus ha impactado a todas las industrias en mayor o menor medida. El ámbito del marketing digital, y especialmente el de las redes sociales no ha sido menos y también ha conocido cambios a raíz de esta excepcional situación que estamos viviendo. El uso de las redes sociales y las expectativas...
Sin duda alguna, el coronavirus ha impactado a todas las industrias en mayor o menor medida. El ámbito del marketing digital, y especialmente el de las redes sociales no ha sido menos y también ha conocido cambios a raíz de esta excepcional situación que estamos viviendo.
El uso de las redes sociales y las expectativas de los consumiodores
La incertidumbre que creó en un inicio esta situación, llevó a que muchas marcas cuestionasen la idoneidad de seguir lanzando campañas de marketing de influencia. También supuso la reducción de la partida de presupuestos destinada a marketing de muchas empresas. Todo ello hizo que, en un primer momento, hubiese una ralentización de las acciones que llevaban a cabo las marcas en redes sociales y que se redujesen las colaboraciones con influencers.
No obstante, ha quedado demostrado que el uso de las redes sociales ha aumentado de forma exponencial como resultado de este fenómeno. Los usuarios están más conectados que nunca, por lo que no hacer uso de las redes sociales para seguir promocionándose se traduce en dejar vía libre a los competidores, además de dejar de estar presente en la mente de los consumidores y caer por lo tanto en el olvido. Las marcas se han dado cuenta de ello, y poco a poco han ido haciendo uso de ellas. Además, los consumidores han sido los primeros en apoyar que las empresas siguieran anunciándose durante estos tiempos excepcionales, concretamente 80% de los españoles están a favor de ello según el barómetro llevado a cabo por Kantar.
El marketing de influencia: una herramienta de lucha contra el COVID
Por un lado, las redes sociales han servido para que las marcas transmitan un mensaje de positivismo y unión. Muchas son las empresas, que junto con influencers han lanzado campañas de información o de recaudación de fondos contra la pandemia. La influencia ha resultado por lo tanto durante esta crisis ser una herramienta muy poderosa y ha sacado su lado más humano. Se han podido dar a conocer muchísimas acciones sociales gracias a la labor de comunicación de los influencers.
Los influencers: los aliados de las marcas
A medida que la situación ha avanzado, y sobre todo, a medida que se ha ido alargando, las empresas han vuelto a lanzar con cautela campañas de influencia para seguir dando visibilidad a sus productos y/o servicios. Los influencers son, al final, los que mejor conocen a los consumidores y son los que mejor saben comunicarse con ellos en estos tiempos difíciles. Son los mejores actores para seguir manteniendo una relación con las comunidades de seguidores.
Esta situación ha permitido, por lo tanto, crear campañas diferentes y los influencers han transmitido mensajes reales, especialmente los microinfluencers y nanoinfluencers con comunidades más reducidas. Han dado rienda suelta a la imaginación lanzando challenges, concursos y directos en redes sociales.
En esta nueva realidad a la que nos dirigimos y que ya estamos conociendo, los microinfluencers van a jugar un papel muy importante. Se posicionan como actores que transmiten confianza y mensajes veraces a sus comunidades, por lo que van a ser la mejor manera de alcanzar los públicos objetivos de las marcas. Además, invertir en acciones con ellos resulta mucho más económico que hacerlo con celebrities o macroinfluencers. En estos tiempos inciertos y con la crisis que se está viviendo a pesar del desconfinamiento, son la mejor alternativa.